¿Que es esa chispa que llega de la nada? Esa que obtenemos por única vez la primera vez que vemos eso que tanto anhelamos.
Un sueño, un deseo, un gran amor, aquello que queríamos tener y quizás nos robaron la ilusión.
Pero merecemos tenerlo, en el fondo lo sabemos. Si tan solo expulsáramos nuestros demonios de los pensamientos, seríamos eternamente libres.
Una cosa es segura, no seré quien se rinda ante mis sueños, por más que se vean en principio imposibles. Porque cada fallo es estar un poquito más cerca de lograrlo.